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¿Eres de las personas que hablan o de las personas que escuchan?
Me gusta más escuchar, pero cuando empiezo a hablar no hay quien me pare :D
Hace unos meses me sorprendió muy gratamente la apertura de una nueva marca indie lolita que llevaba de una manera genial el classic. Hice mi pedido hace un tiempo pero con tanto lío nunca podía quedar para recogerlo; sin embargo, por fin pude aprovechar para hacerlo en la quedada del sábado con las chicas (dedicaré una entrada si consigo alguna foto, que no llevé mi cámara xDU). Sí, lo habéis adivinado (o leído en el título, claro está): hoy toca review de La Serpent Velue.
Para mi primera incursión tiré la casa por la ventana y encargué tres prendas: una camisa de mangas removibles y dos faldas. María me ayudó a tomarme las medidas en casa, aunque tengo que decir que Mireille se ofreció muy amablemente a que me las tomara en su casa si lo prefería, y más adelante volvió a insistir por si me era más cómodo para ajustar las prendas, lo cual es un gran punto a su favor y habla mucho de su profesionalidad y dedicación. Ya sé que me repito más que el ajo, pero siempre me gusta recordar que el trato personal que recibes con el handmade es algo que difícilmente puedes conseguir de otra manera, y yo lo aprecio mucho.
Estuve de acuerdo con el presupuesto que ella me hizo, aunque tengo entendido que se puede negociar. También me consultó acerca de los tonos y los detalles, como qué tipo de encaje me gustaría para la camisa; ya veis que todo se hace siempre a gusto del cliente, totalmente personalizado.
Lo que más me preocupaba era mi horrible horario para quedar, por lo que estuve un buen tiempo sin recoger el pedido -_-U Mireille no me lo reprochó en ningún momento, guardó mis cosas sin ninguna queja e incluso se disculpó como si tuviera alguna culpa, ¡es un amor!
Como mi cámara está algo pachucha he pedido a María que me hiciera las fotos con la suya. Tengo que decir que las prendas ganan más en persona, la verdad, aunque creo que las fotos os gustarán.
En primer lugar, la camisa. Está hecha con una tela suavísima, en un principio temí que se transparentara (es algo que me da pavor en las camisas xD) pero por suerte no ha sido así. Lo que más me ha gustado ha sido el encaje, con florecitas (cómo me conoce Mireille), el cuello y las jaretas (soy súper fan de las jaretas, ¡fundaré un club!). Las mangas se abrochan con automáticos y no con botones, lo que es de agradecer. Aparte, creo que este tipo de camisa es muy útil para una lolita, una gran inversión para el fondo de armario.
En segundo lugar, la falda azul. Siempre me han gustado las faldas con este corte, aunque no estaba segura de cómo me quedaría. La tela tiene una caída muy elegante, y con el petticoat tiene la forma perfecta (sin el petti no tiene demasiado encanto, la verdad, porque queda muy chafada). Tiene un tacto muy suave y el tono de azul que quería, así que para mí ha quedado como la prenda perfecta para ir elegante y a la vez cómoda, porque ¡oh, gracias al cielo! la cintura no tiene elástico como las cinturas asesinas de Bodyline o IW, sino que te deja respirar al mismo tiempo que se ajusta a la cintura. Quizá a alguna le parezca una tontería, pero a mí me molesta mucho que una falda apriete hasta el punto de que te la quieras desabrochar, siendo tu propia talla. Estoy muy contenta de que este no sea el caso.
En tercer lugar, la falda verde. Es un color que no suelo ver en el lolita, y cuanto más la veo más me chifla (estas líneas las estoy escribiendo con esta falda puesta). Cuando hice el pedido pensaba que la falda azul me gustaría más, pero ahora estoy dudando porque la verde es genial. Tiene un vuelo magnífico, de manera que aun sin petticoat mantiene bastante bien la forma. También es muy suave, la tela un poco más ligera, la cintura también sin elástico (¡gracias al cielo otra vez!) y el tono me tiene hechizada. Modestia aparte, creo que el tono me pega bastante con mi pelo y mi color de ojos (una, que se cree modelo xD). La primera foto es con petti y la segunda sin (por cierto, que en la segunda le dio al sol por salir, yo no he llegado todavía a ese grado fantasmal de palidez –aunque en clase sigan pensando que soy croata-).
¿Volvería a comprar? ¡Seguro! Nada más llegar a casa de la quedada me probé las prendas, y ya no me las quería volver a quitar… Adoro que aun siendo tan bonitas sean tan increíblemente cómodas, que se hayan hecho a mi gusto y medida (snif, snif, algo que no me queda cortito) y el trato tan bueno que he recibido de Mireille. Me gustaría salir un día a la calle y ver a más lolitas vistiendo un classic tan bien pensado, ¡viva la Serpent Velue! (hip, hip… ¡hurra!).